LESIONES DEL LIGAMENTO CRUZADO ANTERIOR

Parte de la vida para muchos es la práctica de un deporte es su pasión. Otros solo admiramos o hacemos ejercicio por salud. Pero lastimosamente las lesiones están a la orden del día para todos, pero en algunos deportes ese riesgo, es más alto. La lesión del ligamento cruzado anterior es una consulta muy frecuente en la clínica del especialista en ortopedia Dr. Hugo Omar Marroquín Martínez. quien se entrevistó sobre este tema que afecta a muchos durante la práctica de deportes cuando implica, saltar y cambiar de dirección en forma repentina, como el básquetbol, el fútbol, el fútbol americano, el tenis, el esquí alpino, el vóleibol y la gimnasia. Son estos deportistas que se ven más afectados con esta dolencia.

¿Qué es el ligamento cruzado anterior?

Es un ligamento situado en el interior de la articulación de la rodilla, de pequeño tamaño, pero de gran importancia funcional. Se denomina cruzado por adoptar dicha disposición en el espacio, en relación al denominado ligamento cruzado posterior (LCP), y a los ejes de la rodilla, tanto en el plano frontal como sagital o lateral. Ambos ligamentos cruzados constituyen el pivote central de la rodilla y controlan los desplazamientos de la tibia sobre el fémur, tanto en el sentido antero-posterior como rotacional

¿Cuáles son las causas?

La mayoría de las lesiones del ligamento cruzado anterior ocurren al practicar deportes y hacer actividades físicas que pueden ejercer presión en la rodilla:

• Reducir la velocidad y cambiar de dirección de manera repentina (con brusquedad)

• Girar con el pie firmemente apoyado

• Caer de un salto de manera incorrecta

• Detenerse de manera repentina

• Recibir un golpe directo en la rodilla o chocar, como un tacle en un partido de fútbol americano

Factores de riesgo:

Las mujeres tienen mayor probabilidad de sufrir una lesión del ligamento cruzado anterior que los hombres que participan en la misma actividad deportiva. Las mujeres que son atletas exhiben un fuerte desequilibrio en los muslos al tener los músculos de la parte delantera de los muslos (cuádriceps) más fuertes que los músculos de la parte trasera (isquiotibiales). Los isquiotibiales ayudan a evitar que la tibia se mueva demasiado hacia adelante (movimiento que puede sobrecargar el ligamento cruzado anterior).

Las personas que padecen una lesión del ligamento cruzado anterior corren mayor riesgo de contraer artrosis en la rodilla, en la que el cartílago de la articulación se deteriora y su superficie suave se vuelve áspera. La artritis puede ocurrir incluso si ya se ha pasado por una cirugía de reconstrucción del ligamento.

¿Cuáles son los síntomas?

En el momento que ocurre la lesión, es posible que escuchar un ruido dentro de la rodilla parecido al que se escucha cuando se rompe una rama de árbol seca, seguido de una sensación de inestabilidad de la rodilla, y habitualmente, un aumento de volumen relativamente rápido dentro de esta articulación.

Otros síntomas más frecuentes:

Dolor e inflamación. Algunas veces los deportistas ignoran estos síntomas y vuelven al deporte, sin embargo, cuando existe inestabilidad las probabilidades de agregar otras lesiones están siempre presentes.

Pérdida de los rangos totales de movilidad por dolor y aumento del contenido liquido dentro de la rodilla.

Dificultad para mantener control de la extremidad inferior afectada y por lo tanto para caminar.

¿Cómo se diagnostica?

Primero la evaluación clínica, segundo es la resonancia magnética son forma más certera de conocer el nivel daño del Ligamento Cruzado Anterior, así como posibles lesiones asociadas.

¿Cuándo se requiere de una cirugía?

• El paso de los años

• Algunas enfermedades.

¿Cómo se diagnostica?

La decisión de operar depende de la gravedad de la lesión y del tipo de paciente. Cuando un deportista de alto rendimiento, por ejemplo, se ve sometido a esta situación y está próximo a periodos de competencia, la decisión del equipo médico puede ser inmediata para comenzar a recuperar lo antes posible, En otros casos, depende exclusivamente del nivel de daño al ligamento. Cuando la rotura es parcial, se podrían utilizar ciertas técnicas para dilatar una cirugía. Cuando la rotura es total, la cirugía reconstructiva es la alternativa más segura para volver en las mejores condiciones a las actividades de la vida cotidiana. En la actualidad existen muchas técnicas modernas para realizar este procedimiento y sea exitoso.

¿Cómo se puede prevenir?

Un entrenamiento y ejercicios adecuados pueden ayudar a reducir el riesgo de sufrir una lesión del ligamento cruzado anterior.

• Ejercicios que fortalecen los músculos de las piernas, sobre todo aquellos para los isquiotibiales, a fin de garantizar un equilibrio general en la fuerza muscular de las piernas

• Ejercicios que fortalecen el centro del cuerpo: las caderas, la pelvis y la parte inferior del abdomen

• Entrenamiento y ejercicios para técnicas adecuadas y posiciones correctas de las rodillas a la hora de saltar y de volver a tocar el suelo

• Entrenamiento para mejorar las técnicas de giros y de movimientos bruscos.

• Utilizar el equipo deportivo especializado en cada área.

Autor del Articulo

Orpeda-Traumatólogo.


Tel: (+503) 2213-1960